Incongruencias en la Casa Blanca por el tratado nuclear con Irán
El jefe del Pentágono, Jim Mattis, admitió que el acuerdo firmado con Irán en materia nuclear es de interés para los Estados Unidos. Sin embargo, días atrás el propio mandamás de la Casa Blanca, Donald Trump había dicho que el pacto en esa materia era una “vergüenza”. Ante la comisión del Senado en una audiencia, Mattis respondió de forma afirmativa a la pregunta de si era interés nacional continuar en el acuerdo nuclear con Teherán. El funcionario estadounidense añadió que si Washington puede confirmar que la nación persa respeta el pacto, entonces “ciertamente debemos mantenerlo”. De esta forma puso en entredicho a su jefe, quien considera todo lo contrario.
Las leyes norteamericanas estipulan que cada 90 días el presidente del país tiene que informarle al poder legislativo si Irán respeta el acuerdo y si quitar las sanciones en su contra es de interés para Estados Unidos. Por otra parte, el mandatario republicano. Hasta el momento, Trump certificó el pacto nuclear con Irán pero dejó claro que el plazo llegaba hasta el día 15 de octubre.
Hace dos años tras Irán, Estados Unidos y el resto de los firmantes -China, Rusia, Francia, Reino Unidos y Alemania- dieron el visto bueno al pacto que además calificaron de histórico. Estos son las cinco naciones con derecho a veto en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
El objetivo del mismo era limitar el programa nuclear de la nación persa y de paso se levantaban las sanciones en su contra. Las autoridades iraníes se comprometieron a usar de forma pacífica la energía nuclear ya no desarrollar o adquirir armas nucleares. Del otro lado, estos países le prometieron quitar todas las sanciones.
Por esa fecha el entonces presidente de Estados Unidos Barack Obama le anunció al mundo que se habían cortado todos los caminos hacia el armamento nuclear. El ex mandatario estadounidense también señaló que se establecerá un equipo para verificar el compromiso de ambas partes.
En cuestión, Irán se comprometió a no producir uranio altamente enriquecido durante los próximos 15 años, a desechar el 98 por ciento de su material nuclear, eliminar dos tercios de las centrifugadoras que tiene instaladas, y otros detalles. A inicios del año 2016 el Organismo Internacional de Energía Atómica confirmó que el país persa cumplía con lo pactado. Fue cuando Estados Unidos dio marcha atrás a algunas de las sanciones impuestas. Sin embargo, dejó otras que no tenían relación alguna con la materia nuclear en cuestión.
Las incongruencias de Estados Unidos respecto al tema del acuerdo nuclear iraní levantan sospechas.
