Google prueba sus primeros taxis sin conductor en Arizona
Phoenix ha sido la ciudad elegida por Waymo, la empresa de coches sin conductor de Google, para comenzar las pruebas de sus taxis autónomos. La compañía norteamericana cuenta con una flota de 100 vehículos a la que acaba de añadir otras 500 unidades. Los coches llevarán un operador humano en la zona trasera del volante por si se hiciese necesaria la intervención del cliente durante el viaje.
Encontrar un taxi a determinadas horas de la noche y en ciertos lugares se vuelve una tarea complicada en algunas ocasiones. Siempre se puede recurrir al teléfono para concertar el viaje de manera previa pero el precio no será el mismo, tirando este al alta. Además de las complicaciones previas, se suma la capacidad de congeniar de estos profesionales del volante. Disputas sobre política o fútbol acaban invadiendo viajes monótonos donde uno se arrepiente de haber subido pero para entonces ya es demasiado tarde. Con el objetivo de evitar todas estas trabas, Google ha creado taxis donde la figura del querido conductor desaparece y se cede todo protagonismo a la tecnología.
Su empresa de vehículos sin conductor, Waymo, perteneciente al conglomerado Aphabet Inc. al que también pertenece Google; lleva desarrollando, desde hace tiempo, toda una serie de pruebas para conocer las necesidades de los clientes. Es ahora cuando los más de 4,5 millones de habitantes de Phoenix (Arizona, EE UU) tendrán la posibilidad de participar en la primera prueba pública de estos nuevos transportes. Una flota de 100 taxis sin conductor han sido puestos en marcha en el día de hoy para el disfruto del gran público. Número que, según ha informado Waymos, será elevado hasta 500 más con el objetivo de satisfacer la demanda.
Los de Silicon Valley apuestan así por la conducción autónoma como su competidor Uber aunque el gigante estadounidense le gana en resultados tecnológicos. Pero aunque apuesten por la tecnología, siempre es mejor tener un as bajo la manga y por ello Waymosha añadido un operador humano detrás del volante que permitirá controlar el vehículo si la intervención humana fuese necesaria. Además, esta palanca servirá también para la retroalimentación del viaje.