El matrimonio homosexual prende el fuego en Alemania
Opuesta durante gran cantidad de tiempo a la unión legal de personas del mismo sexo, Angela Merkel se negaba a contrariar al sector más conservador de su electorado, así como a su aliada bávara, la Unión Social Cristiana, quien se caracteriza por una marcada actitud tradicional en temas sociales de esta índole. Con estos antecedentes fue sorpresivo que la mandataria se declarara a inicios de esta semana, y por primera vez desde que ocupa la cancillería germana, abierta a realizar una votación en conciencia de los diputados conservadores, quienes no recibirán ninguna consigna de voto. Su socio minoritario en la coalición gubernamental, el SPD, aprovechó al vuelo esta ventajosa oportunidad y solicitó que la votación sobre el tema se celebrara cuanto antes, lo que al parecer no se encontraba en los planes de Merkel, quien planificaba extender un poco más este peliagudo asunto que puede provocar ciertas crisis en el seno del gobierno con sus principales aliados.
Alemania parece que está pronta a sumarse a la lista de naciones que han legalizado el matrimonio entre personas del mismo sexo. En esta jornada los diputados alemanes allanaron el camino para realizar una votación el día 30 en el Parlamento que versará sobre la legalización del matrimonio homosexual. Este hecho ocurre a solo días de que la canciller Angela Merkel, principal figura política del país, cambiara su posición sobre el asunto. En este contexto político en Alemania, la legalización del matrimonio homosexual está prácticamente asegurada si se organiza bien la votación: una parte de los diputados de la conservadora Unión Demócrata Cristiana de Angela Merkel están a favor y sus votos se sumarían a los de los demás partidos representados en la Cámara Baja o Bundestag, quienes se han destacado en la realización de campañas a favor de las bodas igualitarias.
Varios diputados han revelado a los medios de prensa que una comisión del Bundestag aprobó en esta semana remitir al pleno el proyecto de ley que autorizaría el matrimonio a las parejas de gays y lesbianas y les otorgaría por primera vez derechos ampliados en materia de adopción. En las redes sociales también varias figuras políticas han expresado su opinión sobre el asunto como en el caso de la diputada de los Verdes, Renate Künast, quien expresó que con estas nuevas disposiciones el camino hacia la igualdad está libre.
La inscripción del texto, que se encuentra en el orden del día de la última sesión plenaria de la cámara antes del receso veraniego, no se oficializará hasta el mismo viernes. De llegar a confirmarse, la votación de los implicados se celebrará en esa misma jornada. Christine Lambrecht, diputada del Partido Socialdemócrata de Alemania aclaró que la excepcionalmente la votación será nominal. Durante años se ha debatido el proyecto de legalización del matrimonio homosexual aunque este proceso se aceleró definitivamente como consecuencia de las declaraciones de Merkel, quien siempre se había manifestado como una de sus principales detractoras.
Opuesta durante gran cantidad de tiempo a la unión legal de personas del mismo sexo, Angela Merkel se negaba a contrariar al sector más conservador de su electorado, así como a su aliada bávara, la Unión Social Cristiana, quien se caracteriza por una marcada actitud tradicional en temas sociales de esta índole. Con estos antecedentes fue sorpresivo que la mandataria se declarara a inicios de esta semana, y por primera vez desde que ocupa la cancillería germana, abierta a realizar una votación en conciencia de los diputados conservadores, quienes no recibirán ninguna consigna de voto.
Su socio minoritario en la coalición gubernamental, el SPD, aprovechó al vuelo esta ventajosa oportunidad y solicitó que la votación sobre el tema se celebrara cuanto antes, lo que al parecer no se encontraba en los planes de Merkel, quien planificaba extender un poco más este peliagudo asunto que puede provocar ciertas crisis en el seno del gobierno con sus principales aliados. Esta delicada situación ha generado cierta tensión y malestar, principalmente en las filas del CDU, donde algunos de sus miembros critican al SPD una ruptura de confianza a apenas tres meses de unas importantes elecciones legislativas. Un nuevo e inesperado giro para muchos en el país europeo pues la adopción del matrimonio homosexual no figuraba en el programa de la coalición firmado por ambas partes hace cuatro años.
El matrimonio entre personas del mismo sexo en Alemania no existe oficialmente hasta la fecha aunque desde el 1 de agosto de 2001, se ha permitido las uniones civiles para parejas del mismo sexo. Estas uniones incluían muchos de los derechos de los matrimonios civiles, pero no todos, y actualmente las parejas homosexuales no tienen derecho a la adopción conjunta ni a todos los beneficios fiscales. Desde el 22 de octubre de 2009, el Tribunal Constitucional de Alemania declaró que todos los derechos y obligaciones del matrimonio se extendieran a las parejas del mismo sexo e instó a la coalición gobernante a realizar modificaciones a la ley, que hasta el momento no se habían llevado a una verdadera posibilidad.