El parto lotus: unidos tras el nacimiento
Cada año llegan al mundo 95 millones de niños, lo que implica que a cada minuto que pasa, 180 madres dan a luz a sus pequeños. Afortunadamente, los partos ya no son como eran antes y la mortalidad infantil ha disminuido de una manera importante debido a un seguido de mejoras tanto para la madre como para el recién nacido. Los hospitales proporcionan seguridad y calidad, evitando así posibles complicaciones que podrían derivar en infecciones mortales. Las nuevas técnicas el parto tampoco paran de llegar: en el agua, de pie, en casa… son muchas las opciones y cada maestrillo tiene su librillo. Pero hay una nueva tendencia que está cobrando fuerza y popularidad en los últimos años: el parto lotus es la nueva moda cuando se trata de traer hijos al mundo.
¿De qué se trata? Durante el embarazo, el bebé se alimenta a través de la madre gracias a la unión que les proporciona el cordón umbilical. Un vínculo que los defensores del parto lotus no quieren romper, hasta que se deshaga de forma natural. Exacto, en esta nueva modalidad, popularizada en 2008, el pequeño recién nacido queda unido a la placenta materna hasta que esta se desprenda sola, lo que puede tardar unos diez días aproximadamente.
El objetivo es que el bebé pueda obtener todos los nutrientes necesarios a través de la madre, y ahorrar al pequeño el estrés que les produce el corte del cordón umbilical. A pesar de su creciente popularidad, todavía no hay evidencias científicas que respalden o contradigan esta nueva moda y sus beneficios no están del todo claros. Sin embargo, la división entre defensores y detractores ya se ha instalado en el debate social. ¿Optarías por el parto lotus en el nacimiento de tu hijo?
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