Un remedio contra el párkinson
El anuncio llega desde los resultados obtenidos que muestran cómo investigadores japoneses han conseguido tratar esta enfermedad con éxito en monos, mediante un tratamiento con células madres pluripotentes inducidas, catalogadas como IPS, por sus siglas en inglés. En ese ensayo realizado en primates y publicado en la prestigiosa revista especializada Nature, este equipo consiguió mejorar los síntomas de la enfermedad a través de ese tipo de tratamiento médico. Otro punto importante es que su aplicación mostró ser segura, ya que una de las principales objeciones a esa terapia con células madres, incluía la posibilidad de que la inyección de ellas pudiera quizás generar un tumor.
Los adulto-mayores son una parte muy importante de la sociedad, que requiere inclusión y aceptación para poder llevar una existencia plena. Tanto la existencia pacífica, como una buena salud, están condicionadas por la forma de vida, por la comunicación intrafamiliar y la convivencia social, es por ello que si no existe una buena dinámica intergeneracional, la vida de los abuelos puede tornarse solitaria y su existencia se va deteriorando cada vez más.
En esa etapa de la vida serios problemas emocionales, como la depresión y sus síntomas acompañantes que son sentimientos de minusvalía, ideas de autorreproche o suicidas . Todos esos síntomas están asociados a las presiones sociales, al aislamiento y alejamiento de los familiares, entre otros factores, que requieren de una mayor atención por parte de aquellos que los rodean para mejorar su calidad de vida. Por ello se ponen en práctica programas entre los que sobresalen algunas instalaciones, como residencias y centros de atención de día para adultos mayores, que ofrecen un espacio para que niños y ancianos interactuan juntos dentro de acciones regulares, que ayudan a prevenir la demencia y otras afectaciones de la vejez y despierta a los abuelos nuevamente las ganas de aprender y de participar .
En el mundo se llevan a cabo hoy en día muchos proyectos que van destinados a reforzar la vinculación social de las personas de la tercera edad. Ese grupo poblacional exige un esfuerzo por parte de las otras generaciones, para incluirlos en las actividades que se realizan diariamente, para que se sientan respetados a la vez que protegidos, porque no hay que olvidar que ellos son quienes poseen mayor experiencia de la vida y de la historia.
Además, varios científicos están intentando encontrar una cura para enfermedades como el Párkinson, mal que aqueja a las personas de la tercera edad y que afecta su estilo de vida. Investigadores japoneses han conseguido tratar con éxito a primates en experimentos para eliminar esta enfermedad, y aseguran que el próximo paso es la intervención en seres humanos.
El equipo establece los finales del año 2018 como la fecha en que previsiblemente comenzarán los primeros ensayos clínicos y experimentos en humanos con células madre para tratar el mal del Párkinson, una enfermedad neurodegenerativa hasta ahora sin cura que afecta a una gran parte de la población adulto-mayor.
El anuncio llega desde los resultados obtenidos que muestran cómo investigadores japoneses han conseguido tratar esta enfermedad con éxito en mono, mediante un tratamiento con células madres pluripotentes inducidas, catalogadas como IPS, por sus siglas en inglés. En ese ensayo realizado en primates y publicado en la prestigiosa revista especializada Nature, este equipo consiguió mejorar los síntomas de la enfermedad a ttavés de ese tipo de tratamiento médico. Otro punto importante es que su aplicación mostró ser segura, ya que una de las principales objeciones a esa terapia con células madres, incluía la posibilidad de que la inyección de ellas pudiera quizás generar un tumor.
No obstante, los científicos japoneses que llevaron a cabo el experimento, constataron que los monos que se utilizaron en el experimento que recibieron en trasplante de células madre realizaron más movimientos espontáneos. Además, a nivel histológico también observaron que las neuronas transferidas extendieron proyecciones hacia el núcleo estriado, lo cual es base de los positivos resultados.
Los científicos nipones afirman que comprobaron que las células no generaron ningún tumor en los dos años posteriores a la experimentación con los simios. Igualmente, defienden que con todos estos datos obtenidos en este periodo, los progenitores dopaminérgicos que se derivaron de células pluripotentes inducidas, iPS, pueden aplicarse clínicamente en el tratamiento de los pacientes con enfermedad de párkinson. Un descubrimiento que definitivamente, mejorará el estilo de vida de muchos ancianos aquejados por este mal tan usual en la sociedad.