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miércoles, 11 de octubre de 2017

Irma y lo que dejó a su paso

Por LauraB

Irma no solo dejó una estela de devastación tras su paso por el Caribe. También causó un fenómeno natural sumamente interesante. Se trata de algo que sucede cuando impactan huracanes extremadamente poderosos. El huracán Irma fue lo suficientemente fuerte como para cambiar completamente la forma de un océano. El mar desapareció completamente en una playa en la isla de Long Island, en Las Bahamas, en el Caribe. Los científicos señalaron que ello se debía a que el meteoro impactó con una presión baja. Esto hizo que succionara el agua de su entorno en el núcleo de la tormenta que también causó estragos.

El fenómeno de la desaparición del mar no fue eterno, pues el agua volvió eventualmente a la playa caribeña.

Nunca antes un poderoso huracán se había formado en el Atlántico. Irma, de categoría cinco arrasó, literalmente, la Gran Cuenca del Caribe. El meteoro impactó el estrecho de la Florida aunque había descendido en su categoría desde cinco, la más alta en la escala Saffir Simpson, hasta la más baja, la dos con vientos sostenidos de entre 240 y 295 kilómetros por hora, según datos del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.

Vientos fuertes e intensas lluvias dejaron al menos 27 muertos en el Caribe y 10 en la Mayor de las Antillas. Los meteorólogos alertaban el gran alcance del fenómeno meteorológico.

El fenómeno meteorológico se formó a finales de agosto en las costas africanas. Comenzó a afectas las costas antillanas a mitad de la semana pasada generando vientos de 295 kilómetros por hora durante más de 33 horas. En la conocida como Gran Cuenca del Caribe la cifra de fallecidos fue la siguiente: diez en la parte francesa de San Martín y en San Bartolomé, seis en los territorios de ultramar británicos, cuatro en las islas Vírgenes estadounidenses, cuatro en la parte holandesa de San Martín, dos en Puerto Rico, tres en Florida y uno en Barbuda.

En Florida 6 millones de personas tuvieron que evacuarse. Allí el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró el estado de catástrofe natural. Ello permitió el desbloqueo de fondos federales. A su vez la emergencia se declaró en Georgia, Carolina del Sur y Virginia. En Haití, Irma causó inundaciones aunque impactó muchos menos de lo que esperaban las autoridades. En la vecina República Dominicana los vientos fueron de 285 kilómetros por hora y el mal tiempo provocó la evaluación de cerca de 20 mil personas.

Todos estos poderosos huracanes son un efecto del cambio climático.