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miércoles, 4 de octubre de 2017

Las nuevas galletas María para Portugal

Por DianaLeon

La galleta María es un producto prácticamente disponible en todas las tiendas del mundo. Son un tipo de galleta dulce muy consumida en Europa, América Latina, así como en India, Pakistán, Sudáfrica, Australia... A pesar de su apariencia sencilla y de ser menos grasas que otras galletas, tienen un alto contenido en glúcidos o carbohidratos (70–75 por ciento) y lípidos (15–20 por ciento), que son mayoritariamente ácidos grasos saturados. En contraposición, la cantidad de proteínas que estas aportan es pequeña, alrededor del 6 por ciento.

Estas características de las galletas son las que han llevado a que Portugal tome medidas con respecto a estos aperitivos. El Instituto Nacional de Salud Ricardo Jorge (INS) de ese país decidió analizar la composición interna de las marías portuguesas. Luego de analizadas, determinaron que no todas las galletas son iguales, pues unas tienen el doble de grasa que otras, sin aparente motivo. Debido a la creciente obesidad de los niños y de la población de ese país en general, el instituto ha recomendado al Gobierno que legisle la cantidad de grasa máxima que debe tener la galleta.

La galleta María es un producto prácticamente disponible en todas las tiendas del mundo. Son un tipo de galleta dulce muy consumida en Europa, América Latina, así como en India, Pakistán, Sudáfrica, Australia, etc. Este dulce fue creado en Londres en 1874 por la empresa inglesa de galletas Peek Freans, con el fin de conmemorar el matrimonio entre la Gran duquesa María Aleksándrovna de Rusia y el príncipe Alfredo I de Sajonia-Coburgo-Gotha, hijo de la Reina Victoria. Las galletas María tienen la peculiaridad de que pueden mojarse en leche caliente sin que se deshagan tan fácil como otras, por su escasa humedad.

Los investigadores escogieron varias marcas de galletas María: con y sin gluten, con y sin azúcar, comprobando que el mismo producto tiene diferencias dietéticas abismales en dependencia del fabricante. Los investigadores determinaron, por ejemplo, que algunos fabricantes emplean el doble de sal y de grasas saturadas, lo que aumenta los riesgos cardiovasculares. El estudio analizó 7 marcas, comprobando que la proporción de grasa iba de los 8,73 gramos por cada 100 hasta los 19,5 gramos.

El Instituto Nacional de Salud Ricardo Jorge indicó al Gobierno de Portugal que es posible producir la misma galleta María con una mejor calidad nutritiva. En ese sentido, pidieron que se establezcan metas para la reformulación gradual de estos alimentos.

La recomendación no está muy descarrilada pues se inserta en las labores iniciadas por ese país contra los malos hábitos alimenticios. Esta labor comenzó por recomendar, a principios de este año, la reducción del azúcar en los sobres de café (de 8 a 5 gramos). Además, aumentaron los impuestos sobre los refrescos con azúcar, lo que ha disminuido su consumo en un 25 por ciento. También, los portugueses comenzaron este curso escolar con máquinas expendedoras de comida sin artículos con excesos de calorías, sal o azúcar. En adición, todos los comedores públicos de hospitales, organismos oficiales y cualquier otro espacio de titularidad pública, como teatros, asilos o cárceles, tienen la obligación de incluir una opción de menú vegetariano.

El veganismo no es una costumbre muy extendida en el país. Es por ello que la nueva ley prevé que si no hay demanda suficiente para el menú verde, el comedor público será dispensado de esa obligación. 

Aunque los adultos portugueses no son especialmente gordos, si están algo por encima de la media europea (16,6 por ciento frente al 15,9 por ciento), pero el Gobierno y el Parlamento del país decidieron hacer del 2017, el año de la guerra al azúcar, tanto mediante el aumento de impuestos, la reducción y regulación de los contenidos no saludables o la eliminación de los productos menos saludables.