El Pentágono exige en Twitter la renuncia de Donald Trump
El Pentágono ha cometido un error imperdonable. “Sin querer” ha retuiteado a un activista que pedía la renuncia del presidente estadounidense Donald Trump. La raíz del problema fue el usuario @ProudResister, quien publicó en su red social un mensaje refiriéndose a las denuncias de abuso sexual que involucran a políticos de los partidos republicano y demócrata.
El mensaje era claro y contundente: "La solución es simple" A Roy Moore le dice: "retírese de la carrera" a Al Franken "renuncie al Congreso"; y en su mejor parte: "Donald Trump: renuncie a la presidencia. GOP [el partido republicano]: dejen de hacer de la agresión sexual un tema partidista. Es un delito, así como lo es su hipocresía".
Pero técnicamente el problema no es el tuit de @ProudResister en sí, a fin de cuentas las redes sociales son plataforma de libre expresión, y no ha sido esta la más brutal de las acusaciones contra el mandato de Trump y sus aliados. Lo verdaderamente grave fue que un aparato legitimador del Estado norteamericano como lo es el Departamento de Defensa, con 5.2 millones de seguidores en esa red social, se dejara ganar por la emoción de las “bonitas palabras” y en una singular metedura de pata, retuitiara el mensaje.
Al respecto, Dana White, portavoz de la institución aclaró que "el operador se dio cuenta del error y lo eliminó de inmediato”. “Un operador autorizado del sitio oficial de Twitter de @DeptofDefense retuiteó erróneamente el contenido que no sería respaldado por el Departamento de Defensa. El operador captó este error y lo eliminó de inmediato”. Sería injusto hacer aquí leña del árbol caído, como enuncia el refrán popular. Verdaderamente en materia de publicaciones e internet, aunque hay que tener los cinco sentidos en función, a cualquiera puede írsele una pifia. Cualquiera, incluso el encargado de las RRSS del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, quien supongo, a estas alturas ya no conserve su puesto de trabajo. Eso sí, no puede negarse que la inusual casualidad, nos pone a pensar en esa voz global, casi que interna en cada ciudadano, sobre el tema Trump, sobre el tema dobleces de su gobierno. Si viviera Sigmund Freud en estos tiempos, probablemente hubiese comentado debajo del tuit: “lo traicionó el inconsciente”.
