La renuncia del presidente más longevo de África
El hasta hace pocos días presidente más longevo de África se llamó a capítulo y decidió renunciar para poner fin de esa forma a la crisis interna en el país que gobernó por casi cuatro décadas. Robert Mugabe, de 93 años y con una esposa 40 años menor fue presionado a finales de la semana pasada por la cúpula del Ejército de Zimbabue para que renunciara al cargo político más alto del país. Sin embargo, la primera reacción del político africano fue resistir y dejar en manos del partido gobernante, el Zanu Pf los destinos del país cuando este se reuniera ahora en diciembre.
Al tomar esa decisión Mugabe hizo caso omiso a la decisión del movimiento de destituirlo y de expulsar a su esposa Grace Mugabe.Representantes de la elite castrense en Zimababue, antes nombrado y conocido como Rodesia, intervinieron y enviaron un mensaje al país de que Mugabe no era más el jefe de Estado. En un primer momento lo arrestaron en su casa anunciando también que respetarían su integridad física y la de su familia.
La decisión de Mugabe de renunciar, aunque tardía, puso fin a una crisis en el país africano. La misma estalló cuando Mugabe destituyó a su vicepresidente Emmerson Mnangagwa. El trasfondo de la decisión fue allanar el camino a Grace Mugabe para un futuro político sin su esposo.En represalia, el vicepresidente saliente fue nombrado como nuevo líder del partido Zanu-Pf.
En los últimos 37 años, Zimbabue pasó de ser una nación próspera a una de las más pobres del llamado continente negro. Con Mugabe al frente del país la minoría étnica fue expulsada del país. Tras la guerra civil de los años 70 entre las guerrillas que lucharon contra el gobierno anterior estuvo la dirigida por Robert Mugabe. Luego, durante la década de los años 80 el triunfo de los movimientos insurgentes los negros tomaron el control del país y le cambiaron el nombre de Rodesia a Zimbabue.
Mugabe renunció a la presidencia un día antes de que se le realizara un juicio político por lo que consideran crímenes y corrupción durante sus 37 años exactos de mandato presidencial. La carta de renuncia la leyó el presidente del Parlamento de Zimababue, Jacob Mudenda, en una sesión extraordinaria de dicha instancia. Los principales medios del país africano y del mundo mostraron imágenes de júbilo de las personas en las calles celebrando la esperada decisión. Al frente del país se quedó el vicepresidente Emmerson Mnangagwa.
